Ir al contenido principal

Viajar a Viena con niños

Museums Quartier - Foto: www.elebe.at
Hace unos 8 años, en una ciudad de España de cuyo nombre no quiero acordarme, una amiga me comentó que se veía obligada a visitar a su madre en taxi, en coche o a pie (lo que le costaba una hora y media) por la sencilla razón de que en los autobuses metropolitanos no estaba permitido subir con cochecito de bebé. Increíble, ¿no? 
Esto nunca pasaría en Viena. No solo está permitido subir con cochecitos a los autobuses sino que tienen su propio lugar con un cinturón de seguridad, lo mismo ocurre en el metro o tranvía. Además, todas las estaciones de metro tienen escaleras mecánicas y/o ascensores. Así que ya sabéis, tener un niño pequeño no es un impedimento para viajar a Austria. 

Y una vez aquí, ¿a dónde ir con niños?

En cada barrio de Viena hay por lo menos un parque, más grande o más pequeño, con un parque infantil maravilloso en su interior o más.
Parque del altes AKH - Foto: www.elebe.at
Os recomiendo el Pötzleinsdorfer Schloßpark, en el distrito 18, donde no sólo se puede jugar y hacer deporte sino que además hay animales. ¿Queréis saber cuál es mi parque preferido? El Türkenschanzpark, en el distrito 18, con sus irregularidades, lagos y árboles impresionantes.

También os recomiendo un pequeño pulmón verde en pleno centro de la ciudad: el campus de la Universidad. Sí, habéis oído bien. El altes AKH, antiguo hospital, es el actual campus de la ciudad y un lugar de encuentro para toda la familia. Allí encontraréis un par de librerías, una autoescuela, un supermercado y tres restaurantes con terraza desde donde podréis disfrutar de un ambiente relajado viendo jugar a vuestros retoños. En esta página encontraréis una lista, en inglés, de todos los parques de Viena: http://www.wien.gv.at/english/environment/parks/

panorama Haus des Meeres - Foto: Herbert Thill
En el barrio de los museos (Museums Quartier) los niños pueden correr y jugar pero también hay un museo para niños a partir de 0 años, el Zoom Museum, con muchas zonas temáticas en su interior. Allí mismo se encuentra el café Dschungel, un lugar especialmente preparado para los más pequeños donde los padres pueden relajarse y tomar algo tranquilamente. 
Haus des Meeres . Puppi. Foto: Jutta Kirchner

Muy cerca de allí se encuentra el oceanográfico, das Haus des Meeres, desde donde disfrutaréis de una maravillosa vista de Viena. También es visita obligada el zoo de la ciudad. Asimismo, el Museo técnico y el Museo de historia natural ofrecen habitualmente actividades especiales para niños, en alemán o a veces también en inglés, pero de todas maneras merece la pena acercarse.
Así que niños y papás y mamás, os esperamos en Viena.
Bis bald!

(Estefanía)

Comentarios

  1. Tienes razón, es una gozada poder pasear por Viena, utilizando los transportes públicos que ofrecen todas las posibilidades para viajar con niños, bien arropados en sus sillitas.
    Y las actividades para niños/as, son innumerables.
    Los parques están dotados de todos los aparatos para el deporte infantil.
    Viajar a Viena con niños/as no es problema.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Aquí somos, allí son... el carácter austriaco

Y a sabemos que generalizar no es bueno. No podemos decir que en Cataluña todas las personas son tacañas, que Andalucía siempre están de fiesta o que todos los españoles son bajitos. Y tampoco que en Viena están siempre de mal humor...  Pero lo que yo sí puedo asegurar como profesora es que... ¡estos temas polémicos son fantásticos para la clase de español! Tomémoslo entonces como lo que son, textos escritos por estudiantes con motivación de aprender - y sin ánimo de ofender... Estefanía, docente en  elebe Sobre ello escribe Roland (curso de conversación de elebe):      Entre cosas como la historia o la composición de la población también el carácter del paisaje define el carácter de la población. Es una diferencia enorme si vives en un valle aislado en Tirol o Vorarlberg o en una ciudad de casi dos millones de habitantes como Viena. Se podría decir que la capital es demasiado grande para el país. Pero esto es una consecuencia de la desmembración del Imperio austrohú

El Café Central de Viena. Un café con historia

Entrada . Foto @Café Central   Uno de los cafés más emblemáticos de Viena es el famoso Café Central que antaño, reunía en su local a las mentes más preclaras del arte, la política y la literatura, como Freud, Trotsky, Klimt... Stewan Zweig fue uno de los asiduos, aunque no tan conocido como otros, sin embargo, en su exilio, lo que más  recordaba eran las tertulias del café, las lecturas de los periódicos de medio mundo y las revistas literarias y artísticas que se ofrecían gratis a los clientes. El café Central se inauguró en 1860, convirtiéndose en el lugar de encuentro de los intelectuales de la época. Foto @Café Central Está situado en la planta baja del palacio Ferstel , un edificio de estilo neorrenacentista, en el distrito 1. El interior presenta el tono amarillento, simulando el color que podría tener el local debido a la emisión de humos de la gran cantidad de cigarrillos, puros y pipas que allí se consumían. Sus lámparas, sofás y retratos son un refle

Nochevieja en Viena, Silvester in Wien

Silvester in Wien Yo tuve la suerte de estar allí y confieso que quedé impresionada  ¡Doce horas seguidas de música y espéctaculo en las calles! Desde las dos de la tarde hasta las dos de la madrugada la ciudad se viste de gala y sólo suena a fiesta a tu alrededor. Doce escenarios repartidos a lo largo de todo el centro histórico, que esa noche se vuelve completamente peatonal , en los que se puede disfrutar de música para todos los gustos, desde el pop más actual hasta la música sacra proyectada directamente en la Catedral, pasando por rock local, electrónica de vanguardia, melodías sesenteras o espectáculos infantiles. Ver programa  Puestos de comida y bebida  Un Glühwein Retumba toda la ciudad en torno a los puestos de comida y bebida   -a precios populares - de los puestos de los mercaditos navideños que se alargan hasta el Año Nuevo.  A media tarde un cursillo de vals gratuito en pleno centro de la ciudad, ¿se os ocurre mejor escenario? Desde luego, un programa