A pocos kilómetros de Viena, hay una aldea, en el valle de Helenenthal, cerca de Baden, antiguo dominio de la familia imperial austríaca, famosa por la tragedia ocurrida en el pabellón de caza del príncipe heredero Rodolfo de Habsburgo.
Eran tiempos convulsos en el imperio y Rodolfo parece que no estaba muy de acuerdo con las directrices de su padre, el emperador Francisco José I, y quería renovarlo.
El príncipe era muy aficionado a cazar, por tal motivo, el año 1888 fue inaugurado un pabellón de caza en Mayerling, para que Rodolfo tuviera un lugar exclusivo para él.
Rodolfo, casado con Estefanía de Bélgica, no era muy feliz en su matrimonio y buscaba solaz fuera del lecho conyugal, en compañía de la condesa María Vétsera.
El día 30 de enero de 1889, los dos amantes aparecieron muertos en Mayerling.
A raíz de este hecho, se hicieron y hacen muchas conjeturas: ¿Fue suicidio o asesinato?
Rodolfo era un chico muy sensible que había tenido una infancia muy infeliz, a cargo de tutores muy duros que se cree le influyó a lo largo de su vida, ocasionándole trastornos psicológicos; por tanto, se dio por hecho que se habían suicidado por amor, en un momento de enajenación mental.
Sin embargo, analizando los tiempos históricos, ya no se ve tan claro que fuese suicidio.
El cadáver de Rodolfo fue enterrado con todos los honores y el de María Vétsera lo hicieron desaparecer de una forma misteriosa.
El emperador, después de la muerte de su hijo, hizo demoler el pabellón y convertirlo en un convento de carmelitas, para que rezasen por el alma de Rodolfo.
La emperatriz Sisi nunca se recuperó de la muerte de su hijo y llevó luto hasta su muerte, acaecida el 10 de septiembre de 1898 en Ginebra por un asesino anarquista italiano, llamado Luigi Luchen, quien realmente quería matar al Delfín de Francia, pero como no apareció, decidió matar en su lugar a la emperatriz de Austria,
Actualmente, una descendiente de Rodolfo, en una novela, aclara un poco las circunstancias de la muerte de los amantes, pero nunca se sabrá lo que realmente ocurrió.
En Mayerling se pueden ver fotos y escritos que te acercan a la historia y te hacen imaginar la magnitud de la tragedia.
También se pueden admirar el paisaje y la naturaleza del lugar que son idílicos.
(Teresa Mª)
Foto: Nigels Europe Flickr |
Eran tiempos convulsos en el imperio y Rodolfo parece que no estaba muy de acuerdo con las directrices de su padre, el emperador Francisco José I, y quería renovarlo.
El príncipe era muy aficionado a cazar, por tal motivo, el año 1888 fue inaugurado un pabellón de caza en Mayerling, para que Rodolfo tuviera un lugar exclusivo para él.
Rodolfo, casado con Estefanía de Bélgica, no era muy feliz en su matrimonio y buscaba solaz fuera del lecho conyugal, en compañía de la condesa María Vétsera.
Foto: Stephan Schmatz Flickr |
El día 30 de enero de 1889, los dos amantes aparecieron muertos en Mayerling.
A raíz de este hecho, se hicieron y hacen muchas conjeturas: ¿Fue suicidio o asesinato?
Rodolfo era un chico muy sensible que había tenido una infancia muy infeliz, a cargo de tutores muy duros que se cree le influyó a lo largo de su vida, ocasionándole trastornos psicológicos; por tanto, se dio por hecho que se habían suicidado por amor, en un momento de enajenación mental.
Sin embargo, analizando los tiempos históricos, ya no se ve tan claro que fuese suicidio.
El cadáver de Rodolfo fue enterrado con todos los honores y el de María Vétsera lo hicieron desaparecer de una forma misteriosa.
Foto: Stephan Schmatz Flickr |
El emperador, después de la muerte de su hijo, hizo demoler el pabellón y convertirlo en un convento de carmelitas, para que rezasen por el alma de Rodolfo.
La emperatriz Sisi nunca se recuperó de la muerte de su hijo y llevó luto hasta su muerte, acaecida el 10 de septiembre de 1898 en Ginebra por un asesino anarquista italiano, llamado Luigi Luchen, quien realmente quería matar al Delfín de Francia, pero como no apareció, decidió matar en su lugar a la emperatriz de Austria,
Actualmente, una descendiente de Rodolfo, en una novela, aclara un poco las circunstancias de la muerte de los amantes, pero nunca se sabrá lo que realmente ocurrió.
En Mayerling se pueden ver fotos y escritos que te acercan a la historia y te hacen imaginar la magnitud de la tragedia.
También se pueden admirar el paisaje y la naturaleza del lugar que son idílicos.
(Teresa Mª)
Mayerling te emociona por su pasado
ResponderEliminarMuy interesante historia y precioso lugar
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